UN ESTUDIO REALIZADO EN ESTADOS UNIDOS CONFIRMA QUE ES SEGURO HACER EJERCICIO EN EL GIMNASIO

24/09/2020

Confiamos en las medidas implementadas en nuestros centros. Contamos con vuestra complicidad para que se cumplan y sean efectivas. Sabemos que, aunque el riesgo cero no existe, estamos haciendo las cosas bien, pero cuando encontramos un informe que nos lo confirma, nos gusta compartirlo con vosotros.

 

Hoy os traemos un estudio realizado en Estados Unidos. Después de analizar millones de datos de registro de socios en 2.873 gimnasios, clubes deportivos y centros boutique durante tres meses, confirman que “las instalaciones relacionadas con fitness son seguras y no contribuyen a la propagación de la COVID-19”.

 

Desde el 1 de mayo hasta el 6 de agosto de 2020, IHRSA (Asociación Internacional de Salud, Raqueta y Clubes Deportivos) y MXM (una empresa de tecnología especializada en el seguimiento de socios dentro de la industria del fitness) examinaron y compararon los datos de registro de los socios de varias instalaciones deportivas con tasas de infección informadas. Después de casi 50 millones de controles, el estudio encontró que un 0,0023 por ciento dio positivo por COVID-19 y además no hay evidencias de que el contagio haya tenido lugar en el gimnasio.

 

El presidente de IHRSA, Brent Darden, afirmó que “los datos de registro demuestran que los clubes relacionados con la salud, cuando siguen estrictos protocolos de limpieza y seguridad, son seguros. En IHRSA, tenemos la responsabilidad de educar e informar a las personas que deben sentirse cómodas y seguras al ir a las instalaciones de fitness en este momento por todo el país. Los datos muestran que, con los protocolos de desinfección adecuados, las personas pueden regresar con seguridad a sus rutinas de entrenamiento”.

 

Darden insistió en la necesidad de practicar deporte, hoy más que nunca: “Hacer ejercicio nunca ha sido más importante para ayudar a estimular nuestra inmunidad y mejorar la salud mental. La actividad física juega un papel importante no solo en el mantenimiento de un sistema inmunológico saludable, sino también en la reducción de los factores de riesgo del COVID-19 como la obesidad, las enfermedades cardíacas, las enfermedades pulmonares y la diabetes”.

 

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