SARA BRAVO: “GRACIAS A MÁIS QUE AUGA TENGO UNA VIDA MEJOR”

29/11/2020

Cuando escuchamos testimonios como el que os vamos a mostrar,  en Máis que Auga nos vamos a casa todavía más contentos y satisfechos de lo habitual. Sara Bravo, una usuaria del servicio de entrenamiento personal, resume en esta frase lo que ha significado para ella este servicio: «Gracias a vosotros yo tengo una vida mejor. Si llega a ser por los médicos, no me movería de la cama empastillada, y gracias a vosotros hago una vida completamente normal. Puedo correr, reír, sentarme…”

 

Así que hoy vamos a conocer de la mano de Sara el entrenamiento personalizado Máis que Auga, en el que el técnico establece un trabajo ajustado a conseguir los objetivos específicos del usuario. Sara llegó a Máis que Auga hace unos tres años y medio, y cuando lo hizo apenas podía caminar por culpa de un pinzamiento lumbar, que le afectaba al nervio ciático. Comenzó con hipopresivos, pero como apenas podía seguir las clases, decidió cambiar y hacer entrenamientos personales con Jana para mejorar la movilidad y volver a caminar, “algo que puede parecer muy simple, pero que para mí era vital”. Y ¡objetivo conseguido! “Estaba tan contenta qué continué un año y medio más, pero iba a hipopresivos, a natación y a columna+… Entonces, cómo ya me encontraba mejor, sabía hacer los ejercicios y tenía varias clases, lo dejé”, explicó nuestra socia.

 

Esta fue la primera tanda, pero ahora, tras el confinamiento, regresó al entrenamiento personalizado. En este caso no fue por una recaída grave, sino porque quería seguir trabajando en la prevención. “Le pregunté a Aitor -el técnico- si podía adaptar los entrenamientos a mi patología, y si encima puedo bajar unos kilos, mejor. Pero el objetivo prioritario es mi salud corporal. Es un servicio que yo uso a modo preventivo. En vez de ir al fisio con dolor y medicada, voy a Aitor y estoy bien, con mucha movilidad y feliz”.

 

Afirma estar encantada con el entrenamiento: “Estoy tremendamente satisfecha. Voy todas las semanas y voy a seguir yendo. Es un gasto, por supuesto, pero es una inversión en mi salud y en mi movilidad, en mi estilo de vida. Tengo una patología y aposté para mejorar”. Además, en plena pandemia reconoce que “valoro mucho la individualidad, no tocar el material que toca todo el mundo…”

 

Sara, con su alegría desbordante, agradece el trabajo que está realizando Máis que Auga desde el regreso tras el confinamiento: “Muchas gracias por todo lo que hacéis con el corona virus, se nota la implicación que tenéis, cómo nos cuidáis”. Y nosotros sólo podemos agradecerle a ella su confianza en nuestros profesionales, el dejar en nuestras manos su salud y no podemos estar más felices de ver su evolución en todo este tiempo.