Máis que Auga es una familia. En nuestras instalaciones hacemos mucho más que entrenar. Allí conocemos gente, nos relacionamos, surgen amistades, también algún enfado, como en todas las familias y … ¡También nos enamoramos! Hoy, 14 de febrero, Día de los Enamorados, queremos que conozcáis a una de esas parejas que “nació” de Máis que Auga. ¡Allí se conocieron, allí saltó la chispa y allí se enamoraron! ¡Hoy os queremos presentar a Fátima y Ricardo y a su pequeña Ayla!
La historia de amor de Fátima Ozinete y Ricardo Sampedro surgió en el año 2016. Fátima acababa de llegar a Vigo de su Brasil natal y comenzó a entrenar en nuestro centro de Coia, donde trabajaba su hermana Flavia, que es una de las técnicas de MQA. “Normalmente íbamos en horarios distintos, pero ese día coincidimos. Él conocía a mi hermana, que fue la que nos presentó”, explica Fátima. No fue un flechazo total, pero nuestra socia reconoce que “noté algo de interés por su parte”. Y no se equivocó. Ricardo nos explica que “la primera vez que la vi fue en el gimnasio. Yo estaba entrenando solo en la parte de las pesas y, cuando la vi pasar, me quedé mirándola discreto porque me resultó atractiva. Cuando su hermana nos presentó me quedé pillado y no supe que decir, intenté que no se me notará nervioso, pero era obvio”. Y así, como se habían intercambiado los contactos, Ricardo decidió escribir, aunque “creí que no me haría caso. Cuando me contestó, volví a ponerme nervioso, pero al final, fui cogiendo confianza y valor para dar el primer paso”. Y lo hizo muy bien, está demostrado: “Empezamos a hablar por whatsapp para conocernos mejor. Después de un tiempo, pasamos a vernos también fuera del gimnasio y desde entonces no nos separamos más”, afirma convencida Fátima.
Un año después, llegó la pedida de mano. Ricardo buscó el lugar más romántico para sorprender a su pareja, un mirador único en Cedeira con el que algunos dicen que es el `mejor banco del mundo´. “Me llevó al banco de Redondela y me hizo la pedida”, nos cuenta emocionada Fátima, quien reconoce que celebran siempre el día San Valentín, “lo pasamos juntos y con mucho amor”. Han vivido muchas cosas juntos –“su primer viaje en avión lo hizo conmigo para conocer mi ciudad, Río de Janeiro”- y poco después nos fuimos a vivir juntos. Y la felicidad total llegó hace nueve meses. Nació su pequeña Ayla, que “es nuestra alegría”.
Claro, de Máis que Auga no pueden tener un mejor recuerdo y “seguimos yendo a entrenar juntos, bueno siempre que podemos, porque ahora con la niña es un poco más complicado”. ¡Qué viva el amor!