Hoy 21 de marzo se celebra el Día Mundial de la Poesía y nos parece un gran momento para recordar a todas esas personas que nos hacen vibrar con sus escritos, que son capaces de emocionar, de trasladarnos a otros lugares, de hacernos volar la imaginación…

Y en este día dedicado a la cultura y la escritura, nosotros hemos querido hablar con Isabel Porto Collazo, una usuaria de Máis que Auga, que acude con sus niños a la piscina. Isa Porto, además de ser cuentacuentos, hace muy poco escribió su primer cuento para niños, Estrellas de Mantequilla, donde hay mucha emoción y poesía en cada palabra. En este libro se trata sobre un tema complicado y de triste actualidad en estos momentos: Cómo afrontar la pérdida de un ser querido y lo hace de una forma positiva recordando que los que se van, siguen vivos en nuestros recuerdos y en nuestro corazón.

–             Sabemos que una de tus pasiones es contar cuentos. ¿Cómo surgió “Xanotas e Leirotas»?

Surgió a raíz de un curso sobre cuentacuentos que hice con mi amiga Ana, al que nos apuntamos porque era algo que nos gustaba mucho. Hablamos con la profe Bea Campos, le contamos nuestras inquietudes y nos animó a lanzarnos. Empezamos a hacer cuentacuentos en Fun4us, una tienda de juguetes artesanales y educativos, que había en Coia. Al principio nos costó bastante porque nadie nos conocía, pero el boca a boca funcionó y de ahí ya fuimos por muchos sitios… Fue una experiencia maravillosa, en la que aprendí un montón y me lo pasé fenomenal. Y a partir de ahí ya no pude parar de contar cuentos, formarme y estar en este mundo que me encanta

–             Y seguimos con pasiones…. Colaborar con entidades benéficas. ¿Cuéntanos cómo se inició tu relación con Bicos de Papel?

Fue por una llamada que me hizo un gran amigo, Germán Tizón, que nos llamó para hacer una presentación de la gala de Bicos de Papel y a raíz de ahí ya empezamos a colaborar en todas las galas, a ir al hospital a contar cuentos…

–             Precisamente a raíz de esta colaboración, te animaste a escribir tu primer libro, Estrellas de Mantequilla. ¿Por qué?

Conocí y me hice muy amiga de una familia, en la que el pequeño estaba enfermo de cáncer y tenía una hermana mayor. Al conocerlos y empezar a tratar con ellos, recordé una historia real que yo había vivido. Y me levanté un día por la mañana  y salió el libro. Siempre se lo dediqué a ellos, porque gracias a conocer a las familias de Bicos de Papel, salió esta historia que estaba ahí, encerrada bajo llave, y ellos fueron los que me dieron el empujoncito, sin saberlo, a decidirme a escribir.

–             Sin hacer spoiler, ¿qué nos puedes adelantar de Estrellas de Mantequilla?

Es un libro que está publicado en gallego y castellano. Es una historia real sobre Lena, una niña de 9 años, que vive en una familia tranquila, con mucho cariño, rodeada de desayunos con tostadas de mantequilla, chocolate, risas, lloros, enfados de hermanos… Un día Lena se despierta y descubre que algo ha pasado, algo no bueno, que hace que ese olor a mantequilla y a cacao se transforme y se convierta en un olor malo. Esta fue la metáfora que utilizamos en el libro para explicar el cambio vivido. En esta familia pasa algo que ella no entiende porque nadie le explica por no hacerle daño. Y en el cuento tratamos de explicar, de una forma bonita y positiva, que las cosas pasan, nos duelen, tenemos que digerirlas, pasar el duelo, y comprender que cuando una persona se va, se va su cuerpo, pero su persona permanece en nosotros. Porque quedan los recuerdos, las sonrisas, los olores, y eso es lo que hace que esas personas siempre sigan vivas. La frase que resume el cuento es: “Aquello que más queremos está en el fondo de nuestro corazón, tan solo tenemos que cerrar los ojos y escucharlos susurrar”.

–             Y este último año, tuviste más colaboraciones…

Al iniciarme en el mundo de los cuentacuentos, comencé a formarme. Así, me fui a Madrid a una reunión con gente relacionada con la literatura infantil, donde conocí a gente que ya había dado muchos pasos, me enseñó muchas cosas, me aclararon dudas, hice amistades… A raíz de eso hicimos un grupo en el que una compañera, una ilustradora, Cristina, nos propuso hacer un álbum ilustrado, en el que en cada uno de nosotros hablase de un trastorno o de una enfermedad.  Queríamos hacer un libro de inclusión, para dar a conocer la problemática de estos niños que padecen una enfermedad o una patología que les dificulta su día a día. Es un libro solidario, para FEDER (Federación Española de Enfermedades Raras) y que se hizo con micromecenazgo. Al final nos juntamos más de 40 escritores e ilustradores de toda España y el libro se llama Miradas con Alas.

Y con muchas de estas personas y otras nuevas, participamos en un proyecto, durante el confinamiento, que se llamaba “Un día menos, un cuento más”. Lo que hacíamos era que o bien escribíamos sobre una ilustración o al revés: enviábamos un texto y se hacía una ilustración sobre él. Cada día poníamos un cuento diferente para animar a los niños o no tan niños a tener un ratito diferente. A raíz de este proyecto, que nació en Instagram, se creó un proyecto solidario para la asociación Ángel de la Guarda, con el objetivo de recaudar dinero para comprar carros de comida con enseres de primera necesidad para las familias más necesitadas a causa del COVID. Así nació, también por micromecenazgo, el libro solidario Lo pequeño es grande, formado por historias de “Un día menos, un cuento más”, con el que se consiguió dinero para conseguir 122 carros de comida para las familias más necesitadas.

–             ¿Qué significa para ti escribir?

Es una manera de decir lo que siento, me dejo ir, dejo que mis pensamientos fluyan en un papel. Significa expresar lo más profundo de mí en un papel, y si eso puede llegar a alguien, fenomenal. Para mí escribir es una vía de escape, una forma de viajar donde quiero sin moverme desde el sofá, de crecer personal y emocionalmente, una forma de expresarme, de dar pasitos y crecer como persona, una forma de conocerme. Escribir es una parte de mí que me hace ser mejor.

–             ¿Hay nuevo proyecto a la vista?

Hay alguna cosilla por ahí, cositas que he escrito, que espero que pronto vean la luz. Pero ahora mismo, mi proyecto fundamental es seguir formándome en literatura infantil. Acabo de hacer cursos de narración y quiero seguir trabajando en ese sentido, formándome como escritora y seguir contando cuentos.  Yo siempre digo a mis alumnos que “el que algo quiere, algo le cuesta” y mi proyecto es ese “crecer como persona, seguir formándome y poco a poco seguir haciendo cositas”. Espero que la pandemia pase pronto y me deje seguir contando cuentos y poder seguir haciendo cosas con un sentido solidario, que es la que me llena por dentro. En este primer año, los derechos de autor de Estrellas de Mantequilla fueron donados a Bicos de Papel, y los siguientes años irán a otras instituciones similares, para ayudar un poquito a otras personas que lo necesiten.