Del bol de Jana a los 23 metros cuadrados del piso de Charles

19/05/2020

Del bol de Jana a los moratones de Charles. Fueron muchos y muy divertidos los momentos que pudimos compartir en la última webinar de los lunes en Instagram. En esta ocasión Jana, Charles y Xandre (este en menor medida por los problemas de conexión) nos explicaron cómo organizaban sus clases desde casa, las dificultades que se encontraron y los materiales que improvisaban.

 

Nuestra Jana reconoció que el inicio fue duro. Ponerse ante una cámara, hacer los ejercicios sin saber quién está al otro lado, cómo te está entendiendo, fue un reto complicado los primeros días. “Lo pasé mal y reconozco que me caían las lágrimas, pero sólo los primeros días. Después, todo risas”, explicó Jana. La dificultad es evidente: “nosotros tenemos que cuidar la salud de la gente desde casa y es una responsabilidad muy grande, porque tú no sabes quién está al otro lado y cómo se encuentra. Así que tienes que dar la clase con mucho cuidado, con un lenguaje muy sencillo y muy claro”.

 

A medida que pasaban los días, que a través de redes o del wasap llegaban las reacciones de la gente, Jana recuperaba su positividad innata y comenzó a disfrutar.  Nuestra técnica explicó cómo planificaba el trabajo: “Tienes que sentarte, pensar en la gente y preparar las clases, porque una complementaba a otra. Yo apuntaba todo en una libreta, con dibujos de los ejercicios, lo ensayaba y medía el tiempo”. ¡Y menuda libreta que ha hecho!

 

Jana probó distintos escenarios en casa (hasta cuatro) y buscó entre sus cosas, diferentes materiales para hacer deporte. Sus favoritos: La silla, el palo de la escoba, los leggins o medias, los cojines, un molde de bizcocho o la pelota hecha con calcetines.

 

Y para despedirse, Jana recordó las ganas que tiene de volver a las clases “al natural”, “porque para nosotros el mejor regalo es la sonrisa y el contacto con la gente”.

 

Charles ha explotado al máximo los 23 metros cuadrados de su piso, en el que hemos entrado cada día desde el 1 de abril, en especial en su cocina. Charles comenzó explicando que ha llevado bastante bien el confinamiento: “gracias a las clases y a los estudios de la Universidad estaba ocupado. Pero claro, si no tuviese esto, encerrado en un piso de 23 metros cuadrados, sólo y sin poder salir, me hubiese vuelto loco”.

 

En su pequeño piso no era fácil hacer las clases, pero Charles piensa que eso también fue un reto: “Yo vivo en un piso muy pequeño, pero como yo, muchas personas y hemos demostrado que no hay excusa, se puede entrenar y bailar en tu casa, en un espacio de 1,60 de ancho”. Eso sí, también nos contó que se dio muchos golpes contra la pared y la prueba está en los moratones que intentaba disimular con los pantalones largos.

 

Anécdotas, varias, pero la mejor fue cuando en el inicio de una clase de pilates estaba sentado sobre un taburete y este se hundió hasta acabar nuestro técnico en el suelo en una curiosa “cámara lenta, porque no se rompió de golpe”.

 

Y sobre material, que decir. Charles explicó que con una simple cinta puedes marcar una zona; con una bolsa y unos trapos podemos hacer una pelota… A veces lo más sencillo es lo que mejor funciona, además de que nuestro propio cuerpo es el mejor material”.

 

Y nos quedamos con las ganas de ver y oír a Xandre, ya que a pesar de los intentos de Rebeca Ruibal, que volvió a ejercer de moderadora, no hubo forma de conectar. Sólo nos dio tiempo a escucharle decir que “yo no estaba muy al día en esto de las redes” y que el inicio fue complicado, tal y como nos había contado Jana: “Es una experiencia nueva y al principio me costó un poco porque no tienes feedback, es comunicación sólo en un sentido, sin respuesta. Pero, poco a poco, te adaptas”. Lo peor, no verles las caras, está claro, “tienes que prepararlo e intentas llegar a todo tipo de público, pensar en lo que tienen en casa…”, pero resumió diciendo que “estoy muy contento por lo hecho y por mis compañeros”. Y ahí, ¡la conexión dijo basta!

 

Pero si queréis más, por un lado, no os perdáis la charla completa en el siguiente enlace, y tampoco dejéis de seguir sus clases en Casagym. ¡Toda su alegría, su energía y su positividad se colarán en tu casa!