Llegó el calor antes que el verano y con estas temperaturas ya empezaron los cambios en nuestros hábitos. Salimos más y hasta más tarde, estamos más tiempo al aire libre, relajamos nuestras rutinas y también cambia un poco nuestra alimentación. Así que nos pusimos en contacto con nuestra nutricionista Conchi Adrover para que nos diese unas líneas de actuación para poder disfrutar del verano, pero a la vez manteniendo una alimentación equilibrada.

Son consejos sencillos, fáciles de seguir y que os permitirá disfrutar del verano con una comida rica, sana y apetecible.

¿Qué pasa cuando nos vamos a la playa o al monte o de escapada todo el día? Lo fundamental, evitar los aperitivos comprados (patatillas, frutos secos fritos…) y los refrescos azucarados. Hay otras opciones, cómodas y mucho más saludables. En bebidas podemos optar por el agua (lo ideal es que os llevéis una botella de agua congelada que se irá descongelando a lo largo del día y así siempre tendréis agua fresca) o por una infusión helada. Hay infusiones muy ricas en frío que os aliviará una tarde calurosa con un sabor excepcional.

Para comer, tenemos dos opciones. Que lo que os gusta es el bocadillo porque os parece más cómodo, no hay problema, pero tenemos que elegir bien los ingredientes. Primero, un pan integral de calidad y después, el contenido. Tenemos muchas variedades más allá del fiambre: Pimientos con atún, humus con queso, tortilla francesa y tomate…

Que os lleváis la comida en un táper, pues aumentan las opciones. Que os parece como menú para un sábado en la playa, un gazpacho frío o un salmorejo con tortilla o con unas sardinillas en conserva, o una ensalada de legumbres….

Y de postre o para media tarde, lo mejor es llevar la fruta ya pelada y cortada en tápers, ya que no puede ser más apetecible en una tarde calurosa, un poco de fruta fresca y limpia.

¿Qué no nos dio tiempo a cocinar antes de salir?  Pues la verdad es que cada vez hay más opciones sanas en los supermercados para elegir, desde ensaladas completas, gazpachos, humus… Una gran variedad si te paras un poco a ver lo que te ofrecen, sin tener que acudir a la comida procesada.

¿Y si nos quedamos en casa? En verano, ¿qué nos puede apetecer más que ensaladas variadas, con legumbres o verduras, o salpicón, ensaladilla, gazpachos…? Es precisamente lo que mejor sienta cuando el calor aprieta y una ensalada para nada tiene que ser aburrida o repetitiva. Dependiendo de los ingredientes que utilices puedes tener una enorme variedad de menús, y todos ellos muy apetecibles.

Consejos de Conchi. Son muy sensatos, pero a veces es necesario que nos lo digan. Lo mejor es no tener cajas de helados en casa porque si los tienes… los comes. Lo ideal es que el postre sea fruta, que en verano tenemos una enorme variedad, y lo mejor es que ya esté lavada, limpia y preparada en tápers en el frigorífico, de forma que no te dará pereza y tanto mayores como adultos lo disfrutarán. ¿Qué os apetece un helado? Pues hacemos uno casero, que además puede ser un entretenimiento para los niños. ¿Cómo se hace? No puede ser más sencillo. De entrada, si tienes en casa una bolsa de fruta congelada, el helado es inmediato. El contenido al bol, con leche, yogurt, queso fresco, una bebida vegetal, leche de coco… Trituramos y listo para consumir y sin azúcar adicional, ya que las frutas tienen mucha azúcar. ¿Qué no tenemos fruta congelada? Pues troceamos la fruta que queramos añadir con cualquiera de las opciones que os dimos antes, y al congelador unas horas en un molde. A los niños les encantarán y no puede ser un postre más sano.

¿Y cuándo salimos a tomar algo? Es verano y por tanto, es habitual salir un poco más de lo normal. Se puede comer fuera de casa con comida y bebida sana, sin problema alguno. Y algún día, claro que podéis permitiros un capricho, pero eso sí, de forma esporádica. Con sentidiño… nadie mejor que tú sabes lo que puedes y debes hacer.